
La terapia de pareja es necesaria cuando una pareja por sí misma no es capaz de gestionar los conflictos propios que surgen dentro de la relación. Problemas de comunicación, celos, responsabilidades dentro de la casa o el mismo desgaste del amor que se va acumulando el día a día que generan un malestar entre ambos, conflictos, dudas y reproches constantes.
Este tipo de terapia se puede hacer tanto con los dos miembros de la pareja, viniendo juntos a hacer la terapia, y buscando juntos un objetivo común a conseguir o bien, viniendo solo uno de los dos, ya que puede suceder que una de las dos partes no vea la necesidad o no esté dispuesta a hacer el esfuerzo y esto no significa que el otro tenga que quedar esperando. Como las personas y las relaciones somos sistemas, unos influimos a los otros, que uno de los dos ya haga algo diferente o cambie ciertas visiones o comportamientos a través de un proceso terapéutico, ya genera cambios en toda la relación.